jueves, 31 de octubre de 2013

miércoles, 30 de octubre de 2013

ll Concurso literario futuros escritores

Durante el mes de agosto todos estuvimos leyendo poesía, para inspirarnos  y poder escribirlas. Algunos se animaron y escribieron hermosas poesías, algunas ganaron un premio, y ayer fuimos a la escuela 27 DE 5 donde la bibliotecaria Verónica nos recibió e hizo la entrega de premios. 


miércoles, 23 de octubre de 2013

Trabajamos con la profesora de Plástica Dania en la Huerta realizando un mural

martes, 15 de octubre de 2013

Ojos de Dios



Los Ojos de Dios (o Si´Kuli en lengua indígena)
Son elementos ceremoniales sagrados provenientes de los pueblos prehispánicos del suroeste de norte América y la península de México, como son las culturas Wixarika, Huinchol o los indios Navajo, entre otros. En sus orígenes, el Si´Kuli está dedicado a Tate’ Naaliwa’mi si’kuli, la Madre Agua del Este, que tiene especial preocupación por los niños y que es la creadora de las calabazas y de todas las flores, he alli la razon del porque del parecido con las creaciones de la madre naturaleza. Eran presentes que se daban a las familias cuando nacía un hijo, y se les agregaba una vuelta de hilo y diseños en cada año que cumplía, para la protección y la salud. También se usan como ofrendas para pedir protección en otras áreas de la vida cotidiana. Ya desde un tiempo los Ojos de Dios se han esparcido por el resto de América, pero ya dejando de lado el sentido ceremonial, y acercándolos más al arte, con sus formas y colores, son verdaderos mandalas sacados de la naturaleza.
Historia 
La primera mención documentada del ojo de Dios fue aquella creada por los indios Huichol. Estas tribus vivían en partes de la montaña Sierra Madre situada en México. Los objetos consistían en dos varillas cruzadas con hilos brillantes que las mantenían unidas. El uso de los mismos se extendió a los Estados Unidos, en donde diferentes tribus los adoptaron y cambiaron el diseño. Existen indicios de que Navajo utilizó el Ojo de Dios.
Importancia
El propósito del ojo de Dios es proteger a quienes rezan en los altares. Las tribus de nativos estadounidenses creían que el objeto era el símbolo de cosas no vistas y el poder para ver aquellas ocultas al ojo desnudo. Los objetos originales constaban de dos varillas cruzadas, con cada una de las cuatro puntas simbolizando un elemento diferente: agua, tierra, fuego y aire. Estos objetos estaban ubicados en los altares utilizados por las tribus y eran entregados como ofrenda a los Dioses.
Cristiandad
 Los cristianos adoptaron el ojo de Dios a sus propias necesidades. Hoy en día es un estilo popular artesanal para niños, aunque algunos creen que simboliza la creencia en un sólo Dios. El tipo de ojo de Dios utilizado por los cristianos se desarrolló tomando los mismos objetos creados por el Navajo. Esta versión contiene ocho o 12 lados en lugar de los tradicionales cuatro. El énfasis está puesto en el centro del objeto, el cual está hecho de un color diferente del resto para simbolizar el ojo de Dios.
Plegaria 
El ojo de Dios está por lo general relacionado con la plegaria; el artista expresa una plegaria mientras crea el objeto. El orador pide a Dios que cuide de alguien en particular, debido a que muchos de estos objetos están hechos para niños o para el ser amado. El objeto real está destinado como plegaria para un propósito específico, con varios oradores relacionados con el dinero, la salud o el poder. El ojo de Dios es también utilizado en ceremonias espirituales o en rituales.
Características
El ojo de Dios muestra cuatro, ocho o 12 lados, los cuales son simétricos. Los lados del objeto están hechos de madera, típicamente finos y juncos flexibles. El hilo es envuelto alrededor de los bordes y de los lados para crear un llamativo diseño. En el centro exacto del ojo de Dios hay una pieza rectangular cubierta con un color contrastante. Éstas son por lo general de 12 pulgadas (30 cm) de largo, aunque algunos ejemplos modernos son mucho más pequeños o grandes, llegando a medir dos pies (60 cm) o más.  

Geografía 
El ojo de Dios se originó en México antes de pasar a otros lugares del mundo. En los Estados Unidos, estos objetos son más populares en el suroeste, particularmente alrededor de Nuevo México y Arizona, en donde los más tradicionales son creados y vendidos. También se han extendido a más lugares, incluyendo Bolivia y otras partes de América del Sur. Están típicamente hechos por tribus indígenas y por aquellos con un interés por las tribus nativas estadounidenses o indígenas.


 Leyendas Aztecas  
Los Huicholes y el maíz 
Los huicholes estaban cansados de comer cosas que no les gustaban. Querían alguna cosa que pudieran comer todos los días, pero de maneras diferentes. Un joven huichol oyó hablar del maíz y de sus famosos mets, unas tortillas, los chilaquiles y la sopa de tortilla que se preparaba con este cereal. Pero el maíz se encontraba muy lejos, al otro costado de la montaña. Eso no lo desalentó y se puso en marcha. Al cabo de poco tiempo vio una hilera de hormigas y como él sabía que ciertas de ellas eran las guardianas del maíz, las siguió. Pero cuando el joven se durmió, las hormigas, sin ningún problema, se devoraron todas sus vestimentas, dejándolo sólo con su arco y sus flechas. Sin ropas y hambriento el huichol se puso a lamentar. Fue entonces que un pájaro se posó sobre un árbol próximo. El joven apuntó su arco sobre él, pero el pájaro le regañó y le dijo que ella era la Madre del maíz. Lo invitó a seguirla hasta la Casa del Maíz donde ella lo autorizaría a tomar todo lo que él buscaba. En la Casa de Maíz se encontraban cinco bellas doncellas, las hijas de la Madre del Maíz: Mazorca Blanca, Mazorca Azul, Mazorca Amarilla, Mazorca Roja y Mazorca Negra. Mazorca Azul lo encantó con su belleza y su dulzura. Se casaron y volvieron a la villa Huichol. Como él no tenía aún casa, durmieron un tiempo en un lugar dedicado a los dioses. Después, como por encantamiento, la casa de los recién casados se llenaba cada día de espigas que la decoraban como flores. Las gentes venían de todas partes porque Mazorca Azul les ofrecía espigas a manos llenas. La bella esposa enseñó a su marido a sembrar el maíz y a cuidar los cultivos. Enterándose qué delicias ofrecía este nuevo alimento, los animales intentaron robarle. Mazorca Azul enseñó a las gentes a colocar fuego alrededor de los cultivos para espantar a las bestias en busca de espigas tiernas. Los Ancianos cuentan que Mazorca Azul, después de haber enseñado todo lo que ella sabía, se molió ella misma y es de esta forma que los hombres conocieron el excelente atole, una bebida caliente que se prepara con granos de maíz. Mazorca: espiga de maíz.

FELICITACIONES CHICOS DE 6º A, QUEDARON MUY LINDOS SUS OJOS DE DIOS